Elecciones legislativas en Francia:Macron pierde mayoría; la extrema derecha gana 100 diputados

En las elecciones legislativas de Francia, el presidente Emanuel Macron perdió la mayoría y quedó lejos de los 289 escaños necesarios; obtuvo apenas 240.

El marioneta de la familia Rotschild, una de las familias más poderosas del mundo, ahora precisará hacer acuerdos con otros partidos para continuar los ataques contra los trabajadores, principalmente para acabar con las pensiones públicas.

Los Republicanos del ex presidente Sarkozy, quedó como cuarta fuerza política y apoyar a Macron equivaldría a su completo suicidio. Exactamente lo mismo que ha estado pasando con la derecha tradicional en todo el mundo desde el colapso capitalista del 2008.

El grupo del “izquierdista” Jean Luc Melenchon, el ex militante del Partido Socialista, obtuvo 125 diputados.

Pero el verdadero vencedor de las elecciones legislativas francesas es la extrema derecha agrupada en el Frente Nacional, hoy bautizado como Agrupación Nacional, que saltó de ocho diputados nacionales a casi 90.

Es la primera vez que en una potencia capitalista del primer nivel la extrema derecha consigue esa fuerza. Y obviamente esa fuerza solo puede ser conseguida con el apoyo de sectores importantes de la burguesía.

La crisis capitalista mundial sigue avanzando a todo vapor. La guerra en Ucrania, impuesta por el imperialismo norteamericano ha dejado muchos heridos, pero el principal es el imperialismo europeo que sufre el aumento de la inflación y de la carestía de la vida.

La situación es tan grave que el BCE (Banco Central Europeo) acabó de destinar 200 mil millones de euros para compras (“helicóptero”) de títulos públicos podridos de estados en crisis, principalmente Italia, España, Portugal y Grecia. Una crisis muy grave en uno de estos países podría fortalecer la extrema derecha y la política del abandonar la Unión Europea.

Esa política sólo lleva a aumentar los capitales ficticios/ especulativos en Europa, llevando más leña a la hoguera de la crisis capitalista mundial.

La industria alemana corre el riesgo de colapsar con los altos precios de la energía. Y hacerle frente a los precios de China implicaría en someterse aún más al imperialismo norteamericano lo que aumentaría la crisis en Europa.

Las respuestas de los trabajadores europeos ya se empiezan a sentir en varios países. En estos días sucede una gran huelga ferroviaria en Inglaterra, la mayor en Europa Occidental en 40 años.

Para el próximo período, está puesto el enfrentamiento abierto entre los trabajadores y la burguesía mundial.