SOLIDARIDAD CON LOS PUEBLOS DEL PERÚ: LIBERTAD A LOS PRESOS POLÍTICOS Y FIN A LA MASACRE

En nombre de todos los compañeros que conformamos la Comisión Internacional por la Amnistía irrestricta y la eliminación de querellas, elevamos nuestra solidaridad a los pueblos hermanos del Perú. Los cuales se encuentran a dos meses de haber iniciado su levante Popular.

Dicho levante tiene como base la añeja crítica al sistema burgués imperante en el país el cual se traduce no solo en una constitución atrasada que únicamente beneficia a la casta político-económica sobre la mayoría de la población, así como el saqueo de los recursos naturales, sino también en la decadencia del conjunto de los partidos políticos Peruanos los cuales se han aliado a la extrema derecha Peruana, encarnada en el Fujimorismo.

El gran estallido surge a partir de la prisión de Pedro Castillo, pero, como todo levante, eso es únicamente la gota que rebasó el vaso. Como costumbre, El Estado Burgués, ha puesto en juego todos sus elementos represivos y de inteligencia para cooptar las movilizaciones.

Son más de 50 muertos en total, todos a manos de las fuerzas del orden, sea La Policía Nacional o el Ejército, el cual, también ha salido a las calles para amedrentar, tirotear y perseguir a los ciudadanos, no solo que se manifestaban sino también a aquellos que únicamente se encuentran viviendo en poblaciones y barrios populares.

El pasado 22 de enero, la policía arremetió en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), con el apoyo de la rectoría para desalojar a manifestantes y estudiantes que se encontraban resguardando en el local. Es necesario agregar, que fueron los propios estudiantes quienes solidarizaron con los manifestantes que provenían de varias zonas del Perú y llegaban a la capital para el Gran Paro nacional del 19 de enero, brindándoles espacio para su estadía.

Las graves violaciones a los derechos humanos ocurridas a manos de al menos 400 policías antimotines, apoyados por fuerzas especiales, tanquetas y blindados, pero sin la presencia de fiscales, tiene completo peso sobre el Estado y la Rectoría de la Universidad.

La policía destruyó la universidad con su entrada, acechó a los estudiantes hasta dejar varios de estos en estado de pánico, desarrolló acciones incumpliendo todos los protocolos e incursionó en detenciones masivas (a los menos 200 detenciones), todo al estilo de las propias dictaduras cívico-militares.

A su vez, noche tras noche, en las calles de Lima se ha efectuado “barridos” y se detiene a cualquier persona que se presuma participó de las manifestaciones, en este sentido, las detenciones arbitrarias solo crecen y eso es PRISIÓN POLÍTICA.

La represión desmedida, y la actuación terrorista del estado hacia su pueblo es la muestra innegable del miedo que le tienen a la organización popular, clasista y campesina. ¡Libertad a todos los Presos Políticos, Amnistía irrestricta!