Balance en Rojo: Los Desafíos que Empujan a Estados Unidos hacia la Crisis Económica

La propaganda oficial nos quiere hacer creer que la economía capitalista mundial estaría controlando su mayor crisis histórica porque estaría controlando la inflación.

Nada más lejos de la realidad.

El control relativo de la inflación se ha conseguido con la contracción del consumo. Pero las causas de la inflación siguen más fuertes que nunca.

En los Estados Unidos, hay nada menos que US$ 8,2 billones (trillions) de deuda pública que vencen este año y que tendrán que ser reemitidos pagando tasas de interés mucho más altas.

Si en 2023 el gobierno de los Estados Unidos pagó US$ 659 mil millones en tasas de interés, para 2024, proyecta un déficit público de US$ 1,8 billones (trillions), lo que equivale a un año de Brasil.

Situaciones similares se repiten en todos los países capitalistas, principalmente en los más cercanos a los Estados Unidos.

La excepción es Rusia y la razón principal es la militarización y la orientación de la economía a la guerra.

Esa ha sido la misma solución aplicada en los Estados Unidos para impedir que estallara una nueva crisis capitalista, muchísimo peor que la del 2008.

Esa es también la razón del porqué han impuesto un Plan Cóndor 2.0 en América Latina, turbinado desde la Reunión Cumbre Continental de Seguridad, realizada en Quito, Ecuador, en septiembre del 2022, como parte de la Doctrina Monroe revitalizada.

El imperialismo norteamericano nos considera su retaguardia estratégica y nos trata como su patio trasero del cual busca extraer hasta la última gota de sangre.

El capitalismo mundial nos lleva a guerras, como salida para su crisis, en dirección a una gran guerra mundial que sólo puede ser nuclear.La tarea más urgente de los luchadores sociales y los revolucionarios, que son intrínsecamente antiimperialistas, es agruparse en la lucha defensiva contra la brutalidad de la agresión a que estamos expuestos, con el objetivo de acumular fuerzas para avanzar.