La III Guerra Mundial mucho más cerca en Ucrania

En los últimos días, ha sido noticia en toda la prensa mundial el avance de los rusos en Ucrania, a pesar del paquete de US$67 mil millones aprobado por los Estados Unidos.

El mandato del presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, acaba neste mês. El jefe del Estado Mayor, Olexander Syrskyi, recibió la misión imposible de contener el avance ruso con las líneas de defensa entrando en estado próximo al colapso a lo largo de casi todo el frente de guerra, que suma más de 1.000 kilómetros.

En este momento están en desarrollo las maniobras militares Steadfast de la OTAN, Organización del Atlántico Norte, con la participación de 100 mil soldados de más de 30 países simulando la intervención en Ucrania, con declaraciones sobre su envío a Ucrania.

Estos ejercitos duraron cinco meses y están concluyendo en este mes de mayo.

En paralelo a la propaganda guerrerista, la Legión Extranjera francesa ya está actuando activamente y abertamente en Ucrania, principalmente em Donetsk, cerca de Mykolaivka en operaciones de apoyo activo al ejército de Ucrania; 300 soldados ya fueron enviados, como especialistas en artillería, y serán enviados 1.200 más, con el principal objetivo actual de ayudar a proteger Siversk, en apoyo a la 54o. Brigada Mecanizada Independente de Ucrania en Slavyansk. 

El cuidado tomado es que los soldados no son franceses, aunque los oficiales de la Legión Francesa sí lo son. Francia no tiene condiciones de llevar a campo, en una operación militar en el exterior, ni siquiera a una división, y esa situación se mantendrá por lo menos hasta el 2027.

Lo más probable es que el avance ruso en la región se vuelva más cruento después del 9 de mayo, el dia en que se conmemora la derrota de la Alemania Nazi, y que las tropas francesas estacionadas sean uno de los principales objetivos.

En la propaganda de guerra, las líneas rojas de la OTAN han variado, pero cada vez más se encuentra cerca de la realidad de efectivamente intervenir: si un país tercero, como Bielorrusia, interviene; si las tropas rusas que están en Bielorrusia prontas para atacar Kharkiv, la segunda mayor ciudad de Ucrania, intervienen; si las defensas ucranianas colapsan.

La respuesta de la Federación Rusa a la agresividad de la OTAN ha sido mantener el avance de manera continua y del presidente Vladimir Putin haber ordenado la realización de ejercicios nucleares tácticos.

La base de la política de guerra

Al fracaso de la política del imperialismo en Ucrania se le suman el fracaso en la guerra de los sionistas israelíes contra los palestinos, el fracaso de contener al apoyo de los Houthis yemenitas, o Ansar Allah, y de la llamada Resistencia, las derrotas sufridas en África y la creciente dificultad para contener a China en Asia.

La política inicial de la guerra en Ucrania, impuesta a Rusia, en 2022, con el objetivo de acelerar el complejo industrial militar y provocar la caída del gobierno Putin, fracasó miserablemente. El objetivo de dividir a Rusia en 20 países sumisos y aumentar la presión sobre China, ya varias veces calificada como la principal potencia rival de todos los tiempos, quedó lejos de conseguirse.

El imperialismo precisa mantener la producción de armas a todo vapor porque es esta la base de la muy relativa estabilidad económica que existe hoy.

Mientras el acúmulo de capitales ficticios aumenta como una bola de nieve y penetró en todos los poros de la sociedad burguesa, los sectores hegemónicos de la burguesía imperialista norteamericana parecen haber decidido por imponer a Donald Trump nuevamente en las elecciones de este año, pero no al costo de sufrir derrotas humillantes que dificulten la verdadera política, que es conducir el mundo a una gran guerra mundial con posibilidades de victoria.

América Latina ha sido muy apretada como retaguardia de guerra de los Estados Unidos.

La burguesía precisa de la guerra debido a la agudización de su mayor crisis histórica. Los trabajadores y los pueblos oprimidos quieren la paz, pero esta no puede conseguirse sin lucha.