¿Asamblea Constituyente como táctica o estrategia?

Después de la derrota del Apruebo de la “nueva” Constitución pinochetista en Chile, volvió al primer escenario de las discusiones políticas el como substituir a la Constitución pinochetista vigente.

El gobierno Boric busca una salida por medio de mayores concesiones a la derecha, porque la “nueva” Constitución no cambie nada estructural y que sea elaborada por los “especialistas”, es decir por quien controla el parlamento: la derecha.

En las declaraciones que hizo el 11 de septiembre dijo: “El camino de cambios pasa también por hacerse cargo de tener una Nueva Constitución escrita en democracia. Para eso trabajamos con los parlamentarios en el Congreso”.

Las agrupaciones vinculadas a la institucionalidad evidentemente siguen esa política aunque no quieran seguirla, pues es la real politik impuesta por quien está en el gobierno.

En la izquierda “rupturista”, las posiciones principales pasan por el llamado a una Asamblea Constituyente y por la construcción del poder popular por fuera de cualquier vínculo con la institucionalidad.

Esta discusión es importante porque se relaciona con cuestiones centrales de la construcción revolucionaria, o sea, de la construcción de organismos de lucha capaces de disputar el poder con la institucionalidad burguesa.

El debate sobre la Asamblea Constituyente en primer lugar debe relacionarse con los mecanismos para avanzar en la construcción del poder popular.

La primera pregunta que surge es:

¿La Asamblea Constituyente es un problema táctico o estratégico?

Si encaramos la Asamblea Constituyente como una cuestión estratégica, eso significaría que la política para construir el poder popular pasa por la institucionalidad, por los mecanismos controlados por el sistema burgués.

Por otro lado, cuando consideramos a la Asamblea Constituyente como una cuestión táctica, eso significa que se trata apenas de un instrumento táctico para avanzar en la organización de los trabajadores y de los sectores oprimidos.

La política, como táctica pasa por el llamado a una Asamblea Constituyente Libre y Soberana, que implica en que debe ser electa a partir de las Asambleas Populares y Colectivos y como un instrumento del poder popular en substitución a los organismos de poder del sistema pinochetista.

La ventaja de esta táctica (reforzar que se trata apenas de una táctica) es que permite levantar el problema y discutirlo a partir del estado de consciencia actual de las masas, y vincularlo a la creación de organismos del poder popular.

¡Renuncia Boric y toda su corte de canallas!

¡Disolución de los pacos!

¡Libertad para todos los presos políticos!

¡Por una Asamblea Constituyente Libre y Soberana!

(formada a partir de las asambleas populares, sin partidos políticos del sistema pinochetista)

¡Porque la Asamblea Constituyente sea transformada en poder popular!

(en substitución a todos los organismos del poder pinochetista)

¡Arriba los que luchan!

¡A reforzar la franja organizada que resistió el desarme y la cooptación!