La explosión de las manifestaciones pro palestinas en las universidades

La reciente explosión de las manifestaciones pro palestinas en los Estados Unidos, Europa y Australia nos remite al ascenso de masas de 1968.

En aquella época el imperialismo norteamericano había propagandeado que se encontraba próximo a derrotar el Viet Cong, el frente de liberación nacional, porque había casi dos millones de soldados en Vietnam del Sur, habían inyectado millones en la economía al mismo tiempo que habían cercado a la población por medio de una grande cantidad de base militares y las llamadas aldeas estratégicas.

El choque de realidad vino con la Ofensiva Tet de enero de 1968 cuando los Viet Cong y el Ejército de Vietnam del Norte atacaron más de 50 ciudades y bases militares, inclusive Saigón y la Embajada de los Estados Unidos.

La Ofensiva Tet fue un fracaso en términos militares porque los Viet Cong y el Ejército de Vietnam del Norte no pudieron conservar ninguna de las posiciones a parte de haber perdido alrededor de 50 mil combatientes.

Pero sobre el punto de vista político la Ofensiva Tet fue una enorme victoria porque logró hacer escalar las manifestaciones en favor de la paz, la retirada del imperialismo de Vietnam y el derecho de los vietnamitas a su autodeterminación.

El movimiento estudiantil estalló en las universidades norteamericanas y fue tan reprimido como lo está siendo hoy.

Los llamados “Años Dorados” del capitalismo, logrado por el esfuerzo de reconstrucción de la brutal destrucción de la Segunda Guerra Mundial, había llegado al fin.

En mayo de 1968, estalló el Mayo Francés que acabó convirtiéndose en un gran movimiento de masas en que las principales fábricas fueron tomadas durante um mes por los obreros. Ese movimiento fue roto con la ayuda de la izquierda, el Partido Comunista y el Partido Socialista, que tenían gran base obrera, y ayudó a canalizar la crisis por la vía institucional.

Pero los efectos colaterales no se hicieron esperar. Los movimientos de 1968 se extendieron a varios otros países, el movimiento negro avanzó en los Estados Unidos y la derrota en Vietnam llevó a la gran crisis mundial de 1974, que representó un duro golpe en contra del capitalismo mundial, que fue obligado a contenerla con el llamado “neoliberalismo» en la década de 1980.

Los sionistas israelíes, el imperialismo y los pueblos del mundo

Los sionistas israelíes representan un enclave impuesto por el imperialismo en el Oriente Medio, o Asia Occidental, para controlar el petróleo y las vías marítimas de la región.

El asesinato de decenas de miles de civiles palestinos, la mayoría de ellos mujeres y niños no pudo ser silenciado.

El ascenso estudiantil representa lo que siempre ha representado: el anuncio del ascenso de los trabajadores, de la misma manera que sucedió en el Mayo Francés, en el Cordobazo argentino de 1969 o en el ascenso obrero de las décadas de 1970 y 1980.

La brutal represión del imperialismo, que sólo en los Estados Unidos arrestó a mil estudiantes, es un paso importante más para desgastar las ilusiones en relación a la “democracia imperialista”.

La brutal dictadura, con un liviano barniz de “democracia”, va quedando clara. 

La mayor crisis capitalista de todos los tiempos avanza incontenible. Los niveles de parasitismo financiero, que no pasa de un producto del capital en crisis, ha adquirido niveles apocalípticos.

Esta es una época de guerras contrarrevolucionarias y revoluciones.

La apertura de una situación prerrevolucionaria es cada vez más inminente. Las tareas para el nuevo período están puestas.