¿Por qué la guerra se extenderá?

La reciente adhesión de Finlandia y Suecia a la OTAN (Alianza del Atlántico Norte) debería levantar las alertas de los revolucionarios, de los trabajadores y de los pueblos del mundo.

El gobierno de Turquía había bloqueado la entrada de ambos países a la OTAN por causa de la protección a los grupos curdos del PKK (Partido de los Trabajadores del Kurdistán) y del YPG (Unidades de Protección Popular), y de los seguidores de Fethullah Gulen, un elemento de la derecha vinculado al imperialismo norteamericano y que estuvo por detrás del intento de golpe de estado del 2016.

¿Qué está por detrás del aumento de la agresividad del imperialismo?

A parte de eso, Finlandia y Suecia levantarán las sanciones contra la importación de equipos militares.

Un cambio de esa magnitud en la política de esos dos países, que siempre fueron relativamente neutros, refleja que el imperialismo no quiere y no puede dar marcha atrás en su política de guerra.

La Unión Europea recientemente le otorgó el status de candidatos a la entrada en el bloque a Moldavia y a Ucrania, ignorando los pedidos de los países de los Balcanes y de Turquía que están con sus solicitudes paralizadas hace más de 20 años. El propósito sigue siendo direccionarlo contra Rusia.

Ahora la presión de la OTAN contra las fronteras rusas se hará mucho más fuerte, obligando al gobierno Putin a escalar la defensa en dirección a los componentes nucleares.

Cumbre de la OTAN: contra Rusia, China y los pueblos del mundo

En la última reunión cumbre de la OTAN, realizada en Madrid, delegados de varios países declararon públicamente que la única salida para Ucrania es la continuidad de la guerra con el apoyo de la OTAN.

Rusia tuvo su status cambiado de “socio estratégico” a “la más seria y directa amenaza a los aliados”. “La postura militar de Moscú, inclusive en los mares Báltico, Negro y Mediterráneo, bien como su integración militar con la Bielorrusia, desafía nuestra seguridad e intereses.”

La nueva estrategia de la OTAN pone a Rusia y a China como sus principales enemigos. Como la principal “salida”, a parte de las altas dosis de demagogia, aparece el aumento indiscriminado de los gastos militares.

Por detrás de las declaraciones de que la OTAN “no busca la confrontación y no representa cualquier amenaza” está la política más agresiva desde la intervención en Yugoslavia en el final de la década de 1990, y en una escala muy superior porque de esta vez está direccionada contra una superpotencia militar, Rusia, que a pesar de ser una potencia económicamente débil (un PBI similar al de Australia), es la principal aliada de China.

Según las declaraciones de varios funcionarios del primer nivel del gobierno Biden, China es el mayor rival y desafío de todos los tiempos para el imperialismo norteamericano.

El imperialismo más agresivo que nunca

La salida para los trabajadores y los pueblos de la mayor crisis capitalista de todos los tiempos es la lucha contra la guerra y la explotación cada vez más brutal del capital.

El fuerte empeoramiento de las condiciones de vida es el combustible que mueve las revueltas y las revoluciones. El papel de los revolucionarios es estar a la altura de direccionarlas rumbo a la destrucción del estado burgués y la superación del capitalismo como modo de producción, expropiando a los grandes capitalistas como punto de partida.